El sector privado reaccionó positivamente a la noticia de que el gobierno federal sometió una propuesta al Departamento de Hacienda para eliminar el impuesto a la propiedad mueble.
Aunque los entrevistados aclararon que no han analizado en profundidad la medida, sí manifestaron estar complacidos de que el Tesoro Federal se haya unido también en la búsqueda de opciones para la derogación del impuesto al inventario.
“La propuesta tenemos que mirarla un poco más, aunque desde el punto de vista técnico contributivo se ve bien. Quienes la prepararon son profesores de impuestos en Estados Unidos”, fue la primera reacción del contador público Kenneth Rivera, presidente de la Cámara de Comercio de Puerto Rico (CCPR).
No obstante, Rivera teme que no será fácil poner en vigor dicha propuesta -que impondría un cargo de 11 centavos por metro cuadrado a los terrenos-, debido a las presiones políticas.
“Desde el punto de vista político y práctico es bien difícil implantarla porque vas a salir con esto un año antes de las elecciones. Le van a imponer un cargo adicional a todo el que sea dueño de un terreno, y eso resta votos”.
Reconoció que la medida sería sencilla de ejecutar y no da mucho margen para la evasión.
Sobre si el Departamento de Hacienda debería eximir a algunos contribuyentes del pago de este cargo, respondió en la negativa. “Mi recomendación sería que nadie debe estar exento, pero que si hay cualquier efecto regresivo se le dé un crédito o concesión al contribuyente”, señaló, al tiempo que insistió que “esta propuesta habría que mirarla con cuidado, antes de darle el endoso, pero no es una medida disparatada”.
Por su parte, Eduardo Marxuach, presidente de la cadena de supermercados Econo, opinó que todo lo que se haga para atender el reclamo de los comerciantes que, por tantos años han pedido que se elimine el impuesto al inventario, “suena bien” y lo ve con buenos ojos. Sin embargo, le preocupa que a la larga la empresa privada, lejos de obtener un alivio, salga perjudicada.
Habría que tener cuidado que no se convierta en una doble tributación o en una tributación excesiva que afecte a los comerciantes, y resulte ser más nocivo que el actual impuesto”, dijo Marxuach.
Mientras, Iván Báez, presidente de la Asociación de Comercio al Detal (ACDET), también se mostró satisfecho con la opción del Tesoro federal. “Mientras se estén evaluando alternativas, lo vemos bien positivo. Le damos la bienvenida a que se analicen opciones y nos alegra que el gobierno federal se esté envolviendo en esta búsqueda de alternativas para la eliminación del impuesto”, expresó Báez, quien dijo que reconoce la necesidad de fondos que tienen los municipios.