by EFE
Por El Nuevo Diario
EL NUEVO DIARIO, SAN JUAN.- La presencia del medicamento fentanilo en las dosis de heroína que se venden en las calles de Puerto Rico dispara el riesgo de muertes por sobredosis entre los cerca de 44.000 adictos en la isla a esa droga.
El psicólogo Luis Román, que trabaja en el centro de salud SANOS de Caguas, municipio del área metropolitana de San Juan, señaló este martes en entrevista con Efe que los análisis de sangre llevados a cabo las últimas fechas entre adictos a la heroína han mostrado la presencia de fentanilo, un medicamento utilizado para combatir el dolor en enfermos terminales.
El psicólogo detalló que tras la información que llegaba de Estados Unidos sobre la adulteración de la heroína comenzó por parte de SANOS un proceso de realización de análisis de sangre a los adictos a esa droga que mostró que los narcotraficantes estaban introduciendo en Puerto Rico fentanilo en las dosis de heroína que se venden en las calles.
“No tenemos datos exactos de a cuántos adictos afecta, pero los análisis realizados muestran que la heroína que llega a Puerto Rico -principalmente desde México- tiene fentanilo”, indicó Román.
Por ello, SANOS ha iniciado una campaña de prevención entre el colectivo de los adictos a la heroína “educando con estrategias”, según detalló el psicólogo.
Un total de diez centros de salud 330 ya cuentan con medios de emergencia médica para combatir los casos de sobredosis, por medio de un medicamento conocido como naloxona, que anula los efectos letales por sobredosis.
Los centros de salud primaria 330 ofrecen servicios a toda la población con especial atención a las personas que no tienen seguro médico o cuyos seguros de salud son limitados (es decir que no cubren servicios preventivos y primarios).
La naloxona ha llegado en Puerto Rico a la Red 300 gracias a Direct Relief, una organización sin fines de lucro estadounidense que está
financiando y suministrando el medicamento a los centros 330 que operan con la financiación del Gobierno federal estadounidense.
La naloxona se dispensará a partir de ahora sin receta en las farmacias de la isla.
Además, cinco organizaciones de salud 330 están dispensando otro medicamento que ayuda a las personas adictas a los opioides a reintegrarse a su vida diaria.
La medicina se conoce como buprenorfina y con su ayuda las personas pueda recuperarse en dos años o menos de sus adicciones.
El sicólogo sostuvo que queda, en cualquier caso, mucho por hacer todavía, ya que solamente un 8 % de los adictos a drogas en Puerto Rico reciben tratamiento.
El médico internista Ángel González, que lleva a cabo su labor en SANOS junto a Román, dijo a Efe que en Puerto Rico la adulteración de la heroína con fentanilo es un problema creciente que se combate en ese centro de salud con la administración de naloxona, lo que según dijo es el tratamiento más eficaz.
“El fentanilo es sumamente tóxico, mucho más que a heroína”, recordó González, tras explicar que en los adictos se manifiestan una vez ingerido, síntomas tan graves como dificultades para respirar.
