Triple-S Management Corporation continuará este año con la expansión de su red de clínicas de salud, proyecto al que se han destinado unos $25 millones y que forma parte del enfoque preventivo y de cuidado holístico de la salud que ha adoptado el asegurador.
Ese programa de mejoras capitales aumentaría a 11, el número de estas instalaciones en la isla al tiempo que la filial de seguros de salud del conglomerado aumenta su cuota en el Plan de Salud del Gobierno (PSG) Vital, mejora la rentabilidad de la cartera de seguros de salud comercial y busca mantener los niveles de retención en el segmento de Medicare Advantage.
En entrevista con El Nuevo Día, el principal oficial ejecutivo del conglomerado de seguros, Bobby García, indicó que la incursión en el segmento de servicios médicos ha probado ser efectiva para Triple-S, pues ha contribuido a mejorar la prestación de servicios a sus beneficiarios mientras contribuye a mantener a raya la razón de pérdida médica (MLR, en inglés), un término técnico que sirve para resumir cuánto de cada dólar de prima va al pago de los servicios que reciben los pacientes.
“El Medical Loss Ratio o el Benefit Loss Ratio, como me gusta llamarlo a mí, ha llegado a un nivel sostenible”, dijo García haciendo referencia al indicador que se ubicó en su nivel más bajo en cinco años. Al cierre del 2018, el MLR de Triple-S se calculó en 84.5%.
Hasta el año pasado, tres de cada 10 asegurados de salud en Puerto Rico estaban acogidos a alguna cubierta de GTS.
Según García, considerando que factores como el poder económico, la educación, la alimentación y el entorno social son determinantes en el estado de salud de las personas, la aseguradora se ha propuesto acortar la brecha de acceso a la salud que existe en Puerto Rico y en otras